Blog destinado a presentar y comentar la Revelación divina acerca del amor humano: Creado según el designio divino, luego caído y herido por el pecado original, después santificado en el pueblo elegido; elevado por fin a Misterio Grande en el sacramento del matrimonio y hoy tan ferozmente agredido.
En los foros de Catholic net, específicamente en el foro de Solteros Católicos hemos abierto un tema especial para comentar algunos textos del libro La Casa sobre Roca escrito por el padre Horacio Bojorge. El tema se llama Club Fans La Casa sobre Roca y allí pueden encontrar el link a la a lectura del libro además de diversos aportes hechos por los foristas. Para ingresar y comentar basta con registrarse en el foro. La dirección del tema es: http://es.catholic.net/foro/viewtopic.php?f=187&t=17721
Tema 1
Texto “3. LAS MAESTRAS DE LA AMISTAD Las mujeres están llamadas a ser maestras de la amistad. ¿Ustedes vieron que las chiquilinas cultivan la amistad entre ellas, se cuentan las cosas del corazón, tienen su mejor amiga, muchas amigas con las que viven contándose las cosas del alma, y lo que les pasó? La mujer tiene una vida interior rica, compleja. Y como el matrimonio es un camino de amistad, a ella le toca en esto el rol principal. Pero a causa del pecado original, su posesividad aspira a apoderarse del afecto del varón, a dominarlo, a tener acceso al alma de él y a controlarla. Y el varón teme entregársela por temor a ser controlado. Es debido a eso que la que debiera ser maestra de amistad a menudo se equivoca. Sus sombras la traicionan.
Los foristas comentaron: Eugenia :
” Sí, yo también me quedé extrañada en cuanto lo leí la primera vez. Pero luego, lo «mastiqué» mucho en meditación y le encontré el sentido… y ahí me quedé
No necesariamente tiene que darse eso de querer «controlar» al varón. Pero sí me di cuenta del error grande que cometí con quien fuera mi novio. En vez de ser su maestra, de enseñarle sobre la amistad, capaz que me encerraba en mí misma y me ponía triste y terminábamos discutiendo.
No trataba de asfixiarlo o controlarlo, o sea, mi conducta no era de «detective» pero el efecto fue el mismo.”
Marcela :” Por lo menos para mí, descubrir que la mujer debe ser una «maestra de amistad» me dio un nuevo sentido para mi trato con los chicos sea o no con intenciones de algo más que solo amistad.
Ahora bien, también me doy cuenta de que los chicos no siempre andan en busca de una «amiga» sino que quieren en seguida algo más y cuando eso no se les brinda se van decepcionados sin siquiera querer intentarlo Es por eso que cuando se inicia un conocimiento de la otra persona existen varones que no buscan encontrar en principio una amistad verdadera sino que una relación amorosa y cuando una no ofrece eso en seguida se van frustrados a buscarlo en otra mujer.
Rafael de Maria comenta respecto a la publicación de Angy
Angy_29 escribió: Cuando en verdad amas a alguien, insistes, o al menos es lo que he leído de ellos mismos.
Exacto. Ni más ni menos.
La cosa es sencilla. Somos hijos de Dios a semejanza del Altísimo. A partir de ahi todo es más fácil. ¿Qué hace el Señor con un alma indiferente a sus llamadas? ¿Qué hace con un pecador impenitente? ¿Qué hace con sus almas escogidas? Con todos es perseverante. A él nadie le gana en insistencia. Dulce insistencia que hace a base de silenciosa búsqueda.
Y esto con una persona en la que mostramos INTERÉS es sumamente importante. Lo pongo en mayúsculas porque esta palabra es clave. ¡El amor es interesado! El Señor ha pagado alto precio por nuestras almas. No se puede decir que no está interesado en nuestra salvación. Cada uno lo está de la suya y la de su prójimo (quien salva el alma de su prójimo salva la suya). Hemos avanzado en algo, entonces ¿no es egoista buscar interesadamente el amor de otra persona? Aquí depende, como siempre la pureza de nuestro corazón. «Amar es querer el bien a alguien», pues antes de mirar a esa persona en que estamos interesado/a, purifiquemos nuestro corazón antes de que el pecado atraviese nuestra mirada.
He mezclado un par de temas que dan para mucho, pero lo esencial es saber que la perseverancia es un don precioso de Dios. «Muchos son los llamados pero pocos los escogidos». Éstos son los que, como tantos santos anónimos, perseveran en su cometido de amar o procurar el bien de otra persona. Acercándonos a esa persona vemos lo que necesita, si somos nosotros o no. No podemos cometer la vana presunción de ser «poco aptos» para esa persona. Hay un acto de humildad sincero que eleva el amor a la semejanza del Cielo y es decir que uno se siente indigno de esa persona. Si han llegado a ese punto es una señal inequívoca de un amor verdadero.
Pero no cometamos el error de pensar que siendo indignos de esa persona, no merecerla, nos debemos alejar. ¡Para nada!
Seguid adelante, si nuestra intención es pura el Señor hace lo demás, mejor dicho, lo hace todo.