Mons. Aguer – ¿Son Católicos los Católicos Argentinos?
Como siempre, Mons. Héctor Aguer “dice la justa”.
Cita al P. Leonardo Castellani que se adelantó proféticamente, hace más de 50 años, a señalar el fenómeno de la apostasía anónima en Argentina.
Pero la apostasía anónima no es sólo un hecho argentino. Es mundial. Y en Uruguay peor.
Yo soy uruguayo y vivo en Uruguay. Y aquí la apostasía anónima está mucho más extendida,
más grave y menos discernida. Nadie habla de ella.
Aquí se ignora la verdadera naturaleza espiritual del fenómeno y se sigue tratando a los apóstatas como fieles. Y a veces a los fieles como apóstatas.
Y debo decir – no me importa que me tengan por monotemático – que se trata del demonio de la acedia en una de sus manifestaciones.
Porque lo que les pasa a esos pseudocatólicos es que se han asimilado al mundo pero siguen aferrados a la etiqueta y fingiendo la pertenencia. San Pablo los llamó en su tiempo «falsos hermanos» (pseudadelfóis). Los enumera entre los peores peligros por él padecidos (2ª Corintios 1, 26) y lo pone en guardia contra ellos a Timoteo diciendo que tienen aspecto de piedad pero niegan su eficacia, y se los describe así:
«Ten presente que en los últimos días sobrevendrán momentos difíciles, los hombres serán egoístas, avaros, fanfarrones, soberbios, difamadores, rebeldes a los padres, ingratos, irreligiosos, desnaturalizados, implacables, calumniadores, disolutos, despiadados, enemigos del bien, traidores, temerarios, infatuados, más amantes de los placeres que de Dios, que tendrán la apariencia de la piedad pero desmentirán su eficacia. Guárdate también de ellos» (2ª Timoteo 3, 1-5) Siga leyendo y reconocerá el tipo del pseudocatólico mundanizado.