SUSANA SEEBER DE MIHURA
DE SU DIARIO PERSONAL [3]

             Me mira con su boca hundida en mi pecho

EL RECIÉN NACIDO AL PECHO

Junio — 1934 (En Buenos Aires)
Mi chiquito llorando al lado de mi cama. Todo ha pasado como en un sueño. Y ahora mi chiquito, mi chiquito igual a lo que lo había soñado: pero más lindo, más suave su pelito rubio, mi hijo, mi hijo.
No puedo soportar cuando las otras personas lo cargan o le dicen esas estupideces. Pero no, no quiero escribir. Estoy triste, estoy nerviosa. Pero ayer y todos los días desde el sábado he sido tan feliz, tan feliz, que no existía ni el tiempo ni los volúmenes, las dimensiones de las cosas. No sabía a quien quería, si a Jack o a mi chiquito. Estaba como ahogada, envuelta en mi amor, en una felicidad tan inmensa y tan completa y tan inmerecida.
          Mi chiquito querido. Tengo ganas de cargarlo y besarlo, y apretarlo contra mí. Y yo que no comprendía, y que hice todo lo posible para que no naciera, este chiquito mío. Pero yo no sabía que mi bebito era tan blandito y tan suave.

NOTA: Enrique (Jackie) Mihura Seeber nació en Buenos Aires el 23 de junio de 1934

Julio –1934 
Cuando lo tengo así apretado contra mi pecho me gustaría que nunca creciera, que fuera siempre este bebito que me necesita  se prende de mí como un cachorrito hambriento. Pero después, cuando sea más grande, estaré yo como una barrera entre él y la gente burguesa. No podrán llegar hasta él par formarle una visión del mundo. Que beba en mi leche el odio a la mediocridad, el odio a todo lo pequeño y a todo lo vulgar.
          Y ahora mi amor por Enrique y por mi chiquito se ha mezclado; y me parece, a ratos, que mi corazón va a estallar y que tengo que llorar, no sé si de alegría o de tristeza [¿Consolación don de lágrimas?] . De llorar porque es un momento demasiado lindo. Soy feliz en este cuarto, donde todo lo que miro me da un placer profundo. Y me alegro, me alegro de que mi chiquito haya nacido en un cuarto como éste, donde todos los colores están en armonía y donde no hay nada feo ni vulgar.

Agosto — 1934 [1º]
Me mira con la boca hundida en mi pecho. Me mira sin ver, con sus grandes ojos claros. Fija su mirada en la mía como nadie antes la fijó, sin comprender, sin decir nada. Como quien meditara o pensara. Pero hay tanta serenidad, tanta claridad y transparencia en sus ojos, que nadie jamás meditó, en una paz tan grande, sobre algo tan puro y sin problemas. Es una expresión que, después, nunca más reposará en sus ojos claros. Dentro de unos cuantos días ya no me mirará así. Entonces querrá comprender, y mirará con curiosidad. Por ahora sus ojos no interrogan: viven. Y es la vida en su inconsciencia, la raíz, la primera esencia de la vida, de la vida en toda su pureza y universalidad. Ni los animales tienen esa mirada serena y sin personalidad. Las flores o el cielo límpido, o el agua de un estanque, solamente, contemplan así el mundo.
          Tienen las manitas cerradas en dos puños ridículos y apretados. A veces los abre, y parecen estrellitas de mar caídas sobre mis faldas. Hoy, como es domingo, las campanas de la iglesia, aquí cerca, tocan alegremente. Entran junto con el gran rectángulo de sol que calienta mi cama, dentro del cuarto verde donde él duerme. Llenan el cuarto de sonoridades.

2 comentarios en «SUSANA SEEBER DE MIHURA
DE SU DIARIO PERSONAL [3]
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  1. Padre querido
    Muy lindo hasta aquí el diario de Susana(voy a seguir leyendo más). Me genera o despierta mucho amor por la maternidad. Unas expresiones que ella escribió acerca de las manitos de su hijo fueron «Tienen las manitas cerradas en dos puños ridículos y apretados. A veces las abre, y parecen estrellitas de mar caídas sobre mis faldas.» Tiene una mirada muy poética y bellísima que conmueve y hasta da mucha ternura….
    Gracias padre

    1. Muchas gracias por tu sincero comentario Julia. Es verdad. Y no olvidemos que Susana vive en Dios e intercede por las lectoras de su diario. Y que, por algo, el Señor la movió en vida, desde muy jovencita, a volcar por escrito lo que inspiraba en su corazón de mujer, esposa y madre.

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